02x07 - Episode 7

Episode transcripts for the TV show, "Ekaterina". Aired: November 24, 2014 – October 29, 2023.*
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Historical television series starring Marina Aleksandrova as the eventual Russian empress Catherine the Great.
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02x07 - Episode 7

Post by bunniefuu »

EKATERINA II
Temporada 2 - Episodio 7

RUSIA

Camino a Jolmogory

Verano de 1768

No debemos actuar de
manera arrogante sino simple,

sin ser demasiado familiares.

No conocemos el nivel
de educación de esta gente.

Si hay alguna pausa incómoda,
haz como que no la notaste.

Elógialos y cuenta una historia.

Pavel Petrovich, ¿me estás oyendo?

¿Cuánto tiempo han estado en prisión?

El duque y su hija mayor, 27 años.

Los hijos y la hija menor nacieron aquí.

¿Nunca dejaron la prisión?

¿Por qué preguntas eso si
ya sabes la respuesta?

- Ve a buscar agua.
- Aquí.

El duque no se irá.
No abandonará a sus hijos.

Los hijos son adultos.

- Yo no me iría. Sería una traición.
- Él es un hombre débil.

Le diremos que no es para siempre
y que podrá volver cuando lo desee.

- Tú no le permitirás regresar.
- ¿Me estás juzgando?


culpables de ningún crimen. ¡Niños!

Ya no son niños. Llámalos
príncipes y princesas.

Es cruel.

Me juzgas pero esta es
también tu responsabilidad.

Eres el heredero y debes
proteger al trono.

Lo protegeré cuando lo tenga.

El pobre hombre ya sufrió suficiente.

Dejémoslo regresar a Dinamarca.

¿Por qué no te dio pena antes?
¿Qué ocurrió?

No me levantes la voz.

¿Por qué ahora?

¿Con quienes hablan los prisioneros?

Con un par de sirvientes, conmigo,

y en los feriados con el
padre Jakob. Con nadie más.

Elizabeta Petrovna lo prohibió.

Bendígame padre.

La bendigo en el nombre del Padre,
del Hijo y del Espíritu Santo.

- Su Majestad.
- Bendígame padre.

Lo bendigo en el nombre del Padre,
del Hijo y del Espíritu Santo.

Su Majestad, ¿cuántos pobres...

y enfermos reuniré para la oración?

La emperatriz Elizabeta
Petrovna rezaba...

con pobres y enfermos luego
de visitar a los prisioneros.

- Creo que el padre Jakob recuerda eso.
- Es hora de olvidarlo.

Sí, Su Majestad.

Ten piedad de mí Señor, con
tu gran amor y generosidad,

quítame este desasosiego.

Tengo miedo. ¿Puedo regresar?

- Su Majestad, el duque Anton Ulrich.
- Su Majestad.

Su Majestad, ellas son las
princesas Ekaterina y Elizabeth,

y ellos los príncipes Aleksey y Pedro.

Y yo soy su fiel esclavo, el duque
Anton Ulrich de Brunswick.

- Duque.
- Bienvenida Su Majestad.

Este es mi hijo, el gran duque
Pavel Petrovich.

Su Alteza es un honor
darle la bienvenida.

Debemos hablar en privado.

Hijos, déjennos.

Pavel Petrovich, ve a
hacer nuevas amistades.

Su Gracia, pienso que debe
estar cansado de Rusia.

Su hermana, la reina Juliana María
lo está esperando en Dinamarca.

¿Ella es reina?

Usted es como el caballero
galante que viene a...

salvar a La Bella Durmiente.
¿Leyó el cuento?

El caballero llega justo a tiempo.

Porque de lo contrario la Bella hubiera
envejecido y nadie se casaría con ella.

Cásese con Lizka. Usted es
un príncipe y ella una princesa.

No sería un matrimonio morganático.

Lizka sería una muy buena esposa.
Es linda y rara vez se enferma.

Sus dientes están casi intactos y se
enamoró de usted tan pronto lo vio.

Vivirá en el palacio y se ocuparán
de todas sus necesidades.

Esta es una felicidad inesperada.

¡Hijos! ¡Vengan a agradecer a la
emperatriz, nuestra benefactora! ¡Hijos!

Usted también me gusta,
pero ya entregué mi corazón.

Ella conoce la biblia. Sabe hacer
sopa de repollo con picadillo.

¿Qué es el picadillo?

Es esto. Lo comemos durante todo
el invierno y la primavera.

Si se queda a cenar, Lizka le
cocinará un poco.

Aunque el repollo fresco sabe
mejor que la sopa de repollo.

¿A quién pertenece su corazón
Ekaterina Antonovna?

Ella es sorda. Lee los labios.

Allá está su amor.

Deberá partir solo.

Solo… ¿y mis hijos?

Podrá regresar cuando quiera.
Podrá mandarles cartas y regalos.

No puedo abandonarlos.
¿Y si les ocurriera algo?

Sé que esto es inesperado para usted.
Puede conversarlo con sus hijos.

¿Tiene instrucciones para el caso de que
se intentara liberar a los prisioneros?

Sí, Su Majestad. Mi antecesor...

recibió instrucciones de la
emperatriz Elizabeta Petrovna.

¿Qué deberá hacer?

Matarlos a todos de la manera
más rápida y menos dolorosa.

Lléveme de regreso.

Mire. Lo hizo papá. Lo hizo muy
bien a pesar de estar ciego.

Somos una familia unida
y vivimos felices aquí.

Aunque nos gustaría poder
salir a los campos a recoger flores.

Más allá de los muros hay muchas
flores, pero nadie las recoge.

Venga Pavel Petrovich.

Su Majestad.

¿Cómo está Iván?

Iván Antonovich vive modestamente
pero no pasa necesidades.

¿Salió de la prisión?

Sí.

¿Por qué no vino a vernos?

Le puede escribir una carta.

Me alegro de verla.
Me alegro mucho de verla.

De ver su cara...

sus ojos... su cuerpo...

Soy el emperador Iván VI.

- ¿Y usted es?
- Soy Ekaterina.

Ekaterina.

Si uno se hamaca bien fuerte,
puede ver a los campos florecidos.

Ekaterina no los vio, pero yo sí.

¡Pavel Petrovich!

¡Me enamoré de usted!
No lo digo por decir.

Es la primera vez que lo digo.

Diga que se casará conmigo.

Diga que lo hará.

Lo haré. Me casaré con usted.

Lo amaré toda la vida.

Dios nunca perdonará esto.

Eres el futuro soberano. Debes
comprender lo que significa el poder,

y los sacrificios que debes hacer por
el bien de tus súbditos y tu imperio.

Libérelos inmediatamente.
Ahora mismo.

Les daremos un carruaje.
Deje que vengan con nosotros.

Le dije que podía
irse pero lo rechazó.

- Libérelos a todos.
- Eso es imposible.

Son gente maravillosa, gente buena.
Hay mucho amor entre ellos.

Piensan que son felices.

Si los liberamos, los enemigos
de Rusia reunirán un ejército.

Estas maravillosas y amorosas personas
se pondrán a la cabeza de ese ejército.

Unirán traidores,
conspiradores y rebeldes.

No pasaría mucho tiempo antes de
que tú y yo termináramos allí adentro.

Nuestros enemigos
sueñan con destruirnos.

La tarea del soberano es proteger
y defender a su reino a toda costa.

Enrique VIII ejecutó a


Iván el Terrible con
sus oprichniks a 4.000.

Pedro el Grande a 7.000.

Isabel I de Inglaterra
ejecutó a 20.000 rebeldes.

Todos fueron grandes gobernantes.

Elizabeta Petrovna gobernó durante


Y por eso nadie la recuerda,

excepto un cura viejo y el oficial
con un agujero en la cabeza.

- Carta para usted Su Majestad.
- Gracias.

Su Majestad, todo está listo
para la oración.

Su Majestad no orará. Es hora
de olvidar a Elizabeta Petrovna.

Han pasado 8 años y ahora
la emperatriz es otra mujer.

Pavel Petrovich,
el abatimiento es un pecado.

Su Majestad.

Pavel Petrovich irá en el carruaje
con Sofía Stepanovna.

Sofía Stepanovna,
permítame viajar con usted.

Encantada Su Alteza.

Vayámonos. Rápido.

¿Me liberará?

Lo liberaré.

Una vez vi volar a un pájaro. Fue la
cosa más hermosa que jamás había visto.

Su Majestad ¿conoce la orden
de matar al prisionero secreto,

en caso de un intento de liberarlo?
¿Sigue vigente esa orden?

La orden sigue siendo vigente.

¿Habrá otras órdenes respecto
al destino del prisionero secreto?

Haga lo que le dicte la conciencia.

Rezamos por el alma de Iván,
un buen siervo de Dios,

quien murió y fue hacia Ti en una
fecha desconocida y en pena.

Ubícalo en la cámara de tus
santos y haz que tenga paz en Ti,

así como en el Sabio y Redentor
de la humanidad. Amén.

Haz que tu esclavo Iván
tenga paz en Ti. Amén.

Iván fue mi hijo mayor.

Mi primogénito. Mi amor.

Era tan fuerte como tú, Pedro.

Tan bondadoso como tú, Aleksey.

Sonreía como tú Elizabeth...

y hablaba mucho como tú, Ekaterina.

Me comprendía tan bien como lo hacía
vuestra madre, Ana Leopóldovna.

- Perdónenme queridos míos.
- ¿Perdonarte por qué padre?

Perdónenme, perdónenme.

Mi alma está condenada.

Hice algo terrible.

La pobre joven me abrió su corazón.
Le prometí que… y le mentí.

Solamente quería salir
de allí lo antes posible.

¿Qué le prometió?

Casarme con ella.

Muchos hombres me
prometieron eso a mí,

pero como ve, sigo soltera.

Terminaré en el noveno
círculo del infierno.

Condenado a arder por toda la eternidad.

Pavel Petrovich, permítame distraerlo.

Es que no puedo pensar en otra cosa.

Bueno, pero entonces consuéleme a mí.

Enviudé a los 17 años y desde entonces
vivo el momento presente.

Busqué el amor, pero
no pude encontrarlo.

- ¿Qué está haciendo Sofía Stepanovna?
- ¿Qué le parece que estoy haciendo?

- No me atrevo a pensar…
- ¿Por qué no?

Le permitiré hacer, no sólo pensar.

Pero primero necesito cubrirme con una
manta. Tengo una piel muy sensible.

Tiene una piel maravillosa.

Entonces ¿tuviste éxito?

No estoy segura. Casi.

- ¿Casi? ¿Lo asustaste?
- No lo sé.

¿Qué quieres decir con que
no lo sabes? Gracias.

Estaba asustado, muy tenso.

¿Por qué no me hablas claramente?

Es la primera vez que hablo
de un amante con la madre.

Con Su Majestad Imperial.

Sofía, no se trata de curiosidad.

Esta noche los haré ubicar
en la misma habitación.

Pasarán la noche juntos.

Ayer no fue un día normal.

Pavel Petrovich estaba muy
angustiado y necesitaba consuelo.

Tal vez hoy no quiera y se escape.

No se lo permitas.

Su Majestad, él es un muchacho tímido.

No necesito a un muchacho,
necesito a un hombre.

Él seguirá siendo el heredero al trono,
cualquiera que sea el resultado de esto.

Tal vez debería estar rezando por él,
en lugar de ponerlo a prueba.

¿Tú me das consejos?

Tú no sabes los motivos ni necesitas
saberlos. ¡Stepan Ivánovich!

Su Majestad.

¿Queda Troitskoe lejos de aquí?

A unos 20 km. Son unas 3 horas
de viaje si la carretera está seca.

Iremos allí. Haga los preparativos.

- Sí, Su Majestad.
- La finca de los Saltykov está cerca.

Haremos una parada para ver cómo...

está manejando Darya Nikolayevna
los vegetales americanos.

REGIÓN DE MOSCÚ - Pueblo de Troitskoe

Finca de Darya Saltykova

¿Qué no está bien, Su Alteza? Recuerde
las lecciones sobre llegar a la verdad.

El capataz tiene un látigo
y los guardias tienen palos.

Es una propiedad muy grande.

Tienen centenares de siervos.
Un látigo no es suficiente.

Señora…

Mire. Algo no está bien.

No comprendo. Hay algo raro.

Están callados y calmados.

La gente la ama, Su Majestad.

El conde Panin me asusta con
impostores y rebeliones, pero...

Esa chica sierva está sonriendo pero
hay lágrimas en sus ojos.

Hay muchísimas razones
por las que las chicas lloran.

Ese hombre apenas puede inclinarse.
Lo deben haber azotado recientemente.

Así es como funcionan las cosas.

¡El guardia le pegó muy fuerte!
Le pudo haber roto la espalda.

Debe haber tenido una buena razón.

¡Qué felicidad recibirla
aquí, Su Majestad!

Desafortunadamente no
tuve tiempo para prepararme.

Me informaron de su venida
hace apenas una hora.

Por favor, sírvanse kvass.

Es muy hermoso aquí Darya Nikolayevna.
Una de las más bellas vistas en Rusia.

Todo lo que ve es producto de trabajo
duro, no de abandono y pereza.

Los siervos parecen contentos
con sus vidas y su ama.

Gracias.

- Sírvase unos refrescos.
- Gracias.

Por favor, damas y caballeros, sírvanse.

Usted no puede Su Majestad.

Su Majestad, ¿le gustaría
pasar adentro?

No, no, quisiera
que me muestre su finca.

Cuando mi esposo murió, heredé
mucha tierra fértil y 600 siervos.

Es una propiedad grande. Cultivamos
avena y lino. Tengo 12.000 ovejas y...



Venga y le mostraré cómo hacemos
nuestra propia manteca.

Esté alerta. Ubique a sus hombres
y mantenga una vigilancia discreta.

Informe de cualquier peligro.

Su Majestad, probablemente le gustaría
visitar la tumba del conde Saltykov.

Que su alma descanse en paz con Dios.
Veamos primero a los cultivos y cosechas.

¿Qué opina sobre una posible
liberación de los siervos?

Si es por un buen precio ¿por qué no?

No tengo problemas en reemplazar
a los siervos por inquilinos.

Por aquí por favor.

¿Notó algo extraño?

- No, pero…
- ¿Pero qué?

Todo es tal vez demasiado perfecto.

¿Dónde está Pavel Petrovich?

- Está tomando té en la galería.
- ¿Quién está con él?

Sofía Stepanovna,
dos oficiales y su sirviente.

Continúe observando.

¿Cómo ve a los siervos aquí?

Siervos comunes. Golpeados
y exhaustos por el trabajo.

Los días del verano son largos.

Pero, ¿están contentos?

Los siervos no nacieron para estar
contentos. Su destino es la tristeza.

La propietaria, ¿es una dueña buena o no?

Haga que se saquen
las camisas y lo sabrá.

Sabrá si los golpean por
disciplina o para matarlos.

También se puede saber
por los libros de contabilidad.

Cuánto vive la gente, la cantidad...

de nacimientos y muertes en el año.
La cantidad vendida y cómo son vendidos.

Si la dueña separa o no madres
de hijos, esposos de esposas.

- El administrador en Grishnyata…
- Está bien.

Dé otra vuelta por los alrededores.

¿Adónde me lleva? Diga algo.

Pavel Petrovich, vayamos
a ver los vegetales.

No quiero ir.

Luego iríamos a la iglesia y después
a la tumba del conde Saltykov.

No me moveré de aquí.

Como prefiera.

Si fuera apropiado, la besaría.

Pero no puedo mostrar mis sentimientos.

- Pero un poquito más y…
- Sería ir demasiado lejos.

La amo Sofía Stepanovna. ¿Me quiere
usted a mí al menos un poquito?

¿De qué sirven
las declaraciones, Su Alteza?

La necesito. No puedo estar sin usted.

No quiero que me deje
ni por un momento.

Espere hasta esta noche.

¿Quién hizo esto? No tema
y dígame quién lo hizo.

¿Pero qué?

¿Le cortaron la lengua?
Le cortaron la lengua.

Este verano el clima ha sido
bueno y la tierra es fértil.

Hicimos todo según las instrucciones
y las papas resultaron bien grandes.

Es maravilloso. Las regamos
mucho. Diariamente.

¿Dónde está Pavel Petrovich?

Se quedó en la galería.
Los vegetales no le interesan.

- Hicimos todo según el manual.
- Muy bien.

- Bravo Darya Nikolayevna.
- Gracias.

- ¿Está Luka con él?
- Sí.

¿Dónde está Pavel Petrovich?

Se ha decidido. Me hizo
declaraciones de amor.

Asegúrate de que no sean
sólo declaraciones.

- Buen truco, ¿verdad Su Majestad?
- Sí, pero me asustó un poco.

No tengo dinero para estatuas de
mármol, pero quise decorar el parque.

Su Excelencia, la sierva me mostró que…

Venga, le mostraré las papas.

Había una con las manos y pies
cortados. Nunca había visto algo así.

- Le cortaron la lengua a la muchacha.
- Suficiente.

Arreste a Darya Saltykova.

Es aquí. Muéstrenos la más grande.

Esto es lo que llamo una buena cosecha.

Mi difunto suegro plantó algunas
hace 30 años. Cuéntele eso.

Su Majestad, crecieron grandes
como huevos de gallina.

El antiguo propietario murió
y todos se olvidaron del tema.

Pero estas son mucho más grandes.

Muy bien Darya Nikolayevna.

- ¡Llévensela!
- ¡Vamos, vamos!

- Su Majestad.
- ¿Qué ocurre?

Su Majestad. ¡Si lo hubiera
sabido con anticipación!

Debemos partir Su Majestad.
Es peligroso quedarse.

¡Suéltenme! Su Majestad, lo lamento.

Su Majestad, lo lamento.

No me iré hasta averiguar
y resolver todo por mí misma.

Darles dinero a los siervos.

Darles los certificados de libertad
a los que fueron mutilados.

Su Majestad, las compensaciones
y los interrogatorios...

tendrán que esperar.
Ahora tiene que partir.

Atención a la multitud.
Mantengan la línea.

Por favor.

Escóltenlos. ¡Luka, corre al carruaje!

¿Son estos los registros? ¿Todos?
Ve al carruaje Fyokla.

¿Es usted el encargado?
¿Hay más documentos?

Todo está aquí. Están al día. Documentos
de impuestos, listas de personal, todo.

¿Llevó un registro de los muertos?

Todo registrado y actualizado hasta hoy.
Pasaron todas las inspecciones. Yo…

¡Partimos de inmediato!

¡Entren en los carruajes!

¿Qué hacen? ¿Y yo?

Estuve mirando pero no vi nada.
No comprendo a la gente.

No comprendo a Rusia.

Su Majestad un palacio imperial
está cerca y pronto llegaremos allí.

Podría cenar, descansar y pasar la
noche. Continuaríamos en la mañana.

No. Seguiremos toda la noche, parando
sólo para cambiar los caballos.

Quiero salir del territorio
de Moscú lo antes posible.

Pavel Petrovich.

SAN PETERSBURGO

Capital del Imperio Ruso

Bienvenida de regreso Su Majestad.
Inclínense ante la emperatriz.

¿Dónde está Grigory Grigoryevich?

Lo vi hace una hora.
No sé dónde está ahora.

- ¿Está enfermo?
- No, no, está bien.

No puedo creer mi felicidad. Mi corazón
me dolía por tan larga separación.

Grigory Grigoryevich, te extrañé.

Dios mío, estoy tan feliz, mi Dios.

¡Qué bueno! Nunca me sentí tan bien.

Grigory.

Mi amor, mi único amor.

Todo está bien ahora.

Creo que voy a morir de felicidad.

No lo haga Su Majestad.

Todavía nos quedan muchos
días felices por delante.

Cuando los amos están contentos,
los sirvientes tienen paz.

Es hora de levantarnos. Debemos…

Tenga piedad Su Majestad.

Debemos oír los informes,
dar directivas.

Lo que debemos hacer
es descansar un poquito más.

¿Por qué las relaciones
íntimas cansan a los hombres...

pero revitalizan a las mujeres?

Hay algún significado secreto
en eso, pero no sé cuál es.

Levantémonos.

Aleksey nos dará el informe
más importante.

Le aconsejará enviar la flota...

al Mar Mediterráneo,
hasta la frontera turca.

Mi hermano tiene un talento especial
para eso. Es un estratega nato.

Yo comandaré la expedición y
mi hermano será el vicealmirante.

Pero si envío la flota, San Petersburgo
quedará desprotegida.

Sería vulnerable a ataques
de Francia o Suecia.

Por el momento, los únicos que
nos están atacando son los turcos.

¿Y Dinamarca? ¿Dejará salir
a nuestra flota del Mar Báltico?

Te olvidas de que la reina de Dinamarca
es la hermana del duque Anton Ulrich.

Ella no se acordó de su hermano
durante 25 años. Es un reino podrido.

Bueno, digamos que
Dinamarca nos deja pasar...

y que Inglaterra nos reaprovisiona.
¿Qué hacemos después?

En el Mediterráneo organizaremos
sabotajes y revueltas.

Destruiremos sus guarniciones,
liberaremos las islas griegas.

Los serbios y griegos se
rebelarán con nuestra ayuda,

y erradicarán a los turcos de modo
que no queden rastros de ellos.

- ¿Cuántos barcos debería enviar?
- Todos.

La expedición llevaría un año y hasta casi
dos. ¿No tienes miedo de dejarme sola?

Nos casaremos y dominaremos nuestra
separación con la ayuda de Dios.

Soy el único que puede
derrotar a los turcos.

Porque soy un ganador.

Un ganador.

Hablé con el conde Panin. Él se
ocuparía de los asuntos de estado.

Hemos dejado atrás nuestras diferencias.

Quisiera que me haga un favor
y lo nombre canciller.

Así será. Pero ahora
a levantarse. Levántate.

¡Semión! ¡Ayúdame!

Su Excelencia. Levántese, Su Excelencia.

Tomen de mi monedero
un rublo cada uno.

No le digan nada a la emperatriz.

No quiero preocuparla.

- ¿Y bien?
- Nos vamos.

¿A cuántos asesinó?

Según los libros, hay más
de 100 muertes sospechosas.

Varias docenas de personas
desaparecieron.

¿A cuántos mutiló?

A muchos. Pero es improbable que podamos
averiguarlo con certeza, Su Majestad.

¿Fueron todas mujeres?

Mujeres solteras y casadas.
Además 27 hombres.

Se quejaron al jefe
de policía de Moscú...

pero fueron arrestados
y luego enviados de regreso.

Arreste a todos los cómplices.
Persiga a los que huyeron.

Interrogue a los vecinos y parientes.

Si sabían de los crímenes,
arréstelos también.

A todos los funcionarios
que aceptaron sobornos,

se les quitarán sus títulos de nobleza.

Arreste a los clérigos locales.

Iré al Sínodo a preguntar
por qué esta pobre gente...

no encontró apoyo en la Iglesia.

Esta es la lista de sospechosos.

Creo que deberíamos
decir que Darya Saltykova...

enloqueció luego de
la muerte del marido.

Estaba loca y no
sabía lo que hacía.

De lo contrario, ¿cómo explicar esto?

No lo explicaremos porque
es imposible de explicar.

Entonces Su Majestad debería mandarla
ejecutar. Pero eso también es imposible.

¿Cree usted que ella
es la única en Rusia?

Nuestros nobles disfrutan de la
violencia. Violan, azotan a sus siervos.

Hasta matarlos.

Envían a Siberia a gente
inocente sin motivo.

Y, para ser honesto, ellos matan.

Ella no es una excepción.

Lamentablemente es un caso frecuente.

Entonces eso es una razón más
para hacer cumplir la ley.

Deberíamos hacerla azotar hasta
la muerte, como hizo con los siervos.

La ley prohíbe aplicar castigos
corporales a los nobles.

Entonces córtenle la cabeza,
ahórquenla, elijan algo.

Su Majestad, si la ejecutamos habrá
agitación entre los nobles de Moscú.

Ya están descontentos.

Ella desciende de un linaje muy antiguo.
Tiene muchas conexiones y dinero.

- No podemos ejecutarla.
- No.

Desafortunadamente no.

Entonces, peor para ella.

Pero esta no es la primera vez que
oigo sobre nobles rebeldes de Moscú.

Stepan Ivánovich, averigüe quienes están
descontentos. Haga arrestos en Moscú.

Encuentre quienes son los culpables.
Envíe a los revoltosos a Siberia.

Rusia está en estado de guerra.

Debemos derrotar primero a los
enemigos internos y eliminarlos,

antes de derrotar a los externos.

San Petersburgo está lleno de rumores
horribles. Cuéntenos, Su Alteza.

No tengo nada para contar.

Dicen que despellejaba viva a la gente.

Que luego cosía la piel sobre maniquíes
para ponerlos en el jardín como estatuas.

Su Alteza, ¿vio esas terribles estatuas?

Si no quiere hablar
de la bruja Saltykova,

podemos hablar de Sofía Stepanovna.

Por supuesto. Sobre ella
hablaré muy contento.

Sofía Stepanovna,
estaba esperándola.

No puedo pensar en otra cosa que
no sea en nuestro próximo encuentro.

No puedo ponerme a hacer otra cosa
porque todo me parece tonto y aburrido.

Así que la invito a
venir a mi habitación.

¿Para qué?

- Para poder estar solos.
- No.

Por favor. No me haga sufrir.

No comprendo esta necesidad de
exponer públicamente los sentimientos.

No me importa si se enteran de que la
amo. No me obligue a hacer algo estúpido.

De acuerdo Pavel Petrovich.
Iré pero más tarde.

- ¿No me engañará?
- No.

Se no viene en un cuarto de hora…
regresaré a tomar más té.

El almirante de la flota
será Grigory Grigoryevich.

Aleksey Grigoryevich será vicealmirante.

Vayan organizando a los hombres y...

supervisen toda la
construcción de barcos.

Su Majestad.

Nikita Ivánovich es el responsable
de proveer al ejército...

todo lo que necesite para la guerra.

Desde este momento, usted
y sólo usted será responsable de:

la fabricación de cañones, armas,
pólvora, municiones y uniformes.

De la entrega de madera
a los astilleros...

y de todos los suministros, en
cantidades mayores a las habituales.

De conseguir y entregar caballos...

a precios razonables y
cantidades adecuadas.

También será responsable de
las finanzas del gobierno.

De la evaluación de los
pedidos de los nobles,

los terratenientes y los fabricantes.

De supervisar a las gobernaciones...

y todos los otros temas de
estado de mayor importancia.

Felicitaciones Nikita Ivánovich.

Asume el cargo más
importante de toda Rusia.

Para aliviarle la carga, le regalo
el Palacio de Mármol,


virgen en la gobernación de Poltava,


para el arranque.

¿Bien? ¿Oiré palabras de gratitud?

¿Nikita Ivánovich?

¿Está todavía con nosotros?

¡Su Majestad!

¡Nuestra madre, nuestra protectora!

Nikita Ivánovich, ¿Cómo van
nuestras negociaciones con Prusia?

Desafortunadamente el rey Frederick no
negociará con nosotros Su Majestad.

Quiere esperar a que
se defina el vencedor.

Si derrotamos a los turcos,

él nos ofrecerá una alianza.

Pero si, Dios no lo permita,

los turcos vencen, lo cual
personalmente no creo que ocurra,

Frederick nos atacará
mientras estamos debilitados.

Entonces yo lo presionaré
por un acuerdo...

antes de que comience la guerra.
Ya veré qué le puedo ofrecer.

Para animar a la gente, quiero
que tengamos una celebración...

en honor al comienzo de la construcción
del monumento a Pedro el Grande.

Iván Ivánovich, ¿cómo vamos con eso?

En este momento estoy
buscando los materiales...

adecuados para la base de la estatua.

El teniente Potemkin está trabajando en
los bosquejos con el escultor principal.

Su Majestad.

Al ir a la guerra ¿deberemos
parar la construcción...

de los terraplenes de granito?

Caballeros no hay necesidad de abandonar
todo porque estemos en guerra.

Pueden retirarse todos.

¿No será un poco demasiado todo eso para
el conde Panin? Los otros lo envidiarán.

Van a maquinar y entorpecer su acción.

La envidia es parte de
la naturaleza humana.

No podemos hacer nada para cambiarla.

Le podría haber dado regalos
también a los otros.

Algunos podrían estar envidiosos de
que tú puedes besar a la emperatriz.

¿Debería yo besar entonces
a todos esos hombres?

¡Qué afortunado soy!

- Nikita Ivánovich.
- Hoy no caballeros.

Hoy no. En otro momento.

Nikita Ivánovich insisto. Insistimos.

No, no. Cuando
tenga tiempo les diré.

Entonces podremos reunirnos
y conversar. Adiós.

- ¿Está seguro?
- Se arrepentirá.

¿Arrepentirme de qué?

De su traición. Por haber
jugado a dos bandas.

Está envidioso Lev
Aleksandrovich, ¿cierto?

¿Están ahogándose en bilis?

¿Por qué no aprietan los dientes
más fuerte? Digan algún insulto.

Salgan de aquí idiotas.

Estúpidos sin cerebro.
Vámonos.

¡Usted aún no es canciller
y nunca lo será!

¡Usted es un don nadie, no es nada!

Informe sobre las actividades
del conde Orlov, laborales y de placer.
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